jueves, 13 de octubre de 2011

Dos recomendaciones de nuestra sala de Arte y Literatura



Picasso 85 

(De Carlos Rodriguez-Aguilera); Ed Nueva Colección Labor, Barcelona, 1968

De la contratapa: “Rodriguez-Aguilera, escritor y crítico de arte , ha escrito con visible amor unas páginas sugerentes en las que aborda la difícil tarea de presentarnos al artista más fabuloso de nuestra época- En esta obra la evolución de la raigambre y el perfil del artista corre parejas con el obligado análisis de una obra tan descomunal como proteica.
En un libro de brillantez expresiva poco común, Rodríguez-Aguilera nos ofrece una visión totalizante de Picasso, hombre y obra en la que no falta la valoración de aspectos del uno y de la otra aún poco conocidos. Su contenido consta de siete grandes temas titulados:
1- un largo camino; 2- el mito; 3- el hombre; 4-biografía; 5- obra pictórica; 6- otras obras; 7- consideración final ; más una cronología.






Grandes aforistas
  
Marco Aurelio- Gracián- La Rochefoucauld- Heggel- Nietzsche- O.Wilde- (compilador, Ricardo Baeza); Editorial Emecé, Buenos Aires 1997
“El aforismo, la sentencia-sostenía Nietzsche-, son las formas de la eternidad- Decir en diez frases lo que otro dice en un volumen y lo que otro no dice en un volumen”

Esta colección de aforismos, máximas, y reflexiones, no pretende dar un panorama completo del género. Los escritores seleccionados representan épocas y literaturas diversas. Cubren un vasto compás de siglos, desde fines de la antigüedad grecorromana hasta un ayer más o menos reciente- Todos son escritores clásicos. Pero hay entre ellos ciertas diferencias, porque si bien todos cultivaron con destreza el aforismo. Sólo Marco Aurelio lo hizo exclusivamente, aunque la Rochefoucauld sea recordado sobre todo por sus máximas y en Gracián sean lo más sustantivo de su producción. En cuanto a Nietzsche, Hebbel, y Wilde, es evidente que su obra rebasa la puramente epigramática.



En definitiva, se trata de una selección de ideas y sugestiones de un valor o una belleza esencial: ese fermento de sabiduría que permanece, la levadura capaz de cautivar el espíritu y de nutrir la vida entera.